viernes, 19 de octubre de 2012

Amor.


Quiero escupirte la cara,
Si es que quizás tienes,
porque por lo que haces, diría yo, sólo tenes pene.

Al Egre.

Nunca pensé sentir alegría al descubrir una traición.


Una amarga alegría que adormece lento por dentro,
quizá por que siempre esperé a que ese fuese el final
o porque a lo mejor ahora siento que tengo el control,
que sé la verdad absoluta así tenga que callarla,
así la sufra,
así la viva cada día.

Esa alegría de saber cuando las personas mienten
pero aún así no decir nada.

Esa mentira ajena que se convierte en tu verdad por el miedo,
la angustia y el dolor.

Aquellas fantasías que salen de tus labios,
y que duelen en silencio, castigan en las noches;
Pero que a la vez, llenan de sosiego  mi ser.

Estoy alegre,
porque no hay otra palabra.

Y aun así, en medio de esta mi alegría
tan pujante y real.
Siento decepción,
y me pregunto si alguna vez vaya a toparme con alguien
que no sepa mentir.

Alguien que no sea como vos y que ni en sueños se parezca a mí.







lunes, 8 de octubre de 2012

Miedo.

No quiero despertar en el olvido
y tampoco quiero tomarme la sopa.

Una taza de café al revés.

Y que entonces te haga dormir a los gritos,
te haga llorar con caricias,
te haga reír con insultos.

Decirte siempre que te odio,
para que no sepas que te he odiado
y que el odio sea azul como un día de verano
que tiñe el tiempo de color naranja o quizá de rojo
que brote de las raíces de los árboles y ruede colina arriba en busca de tus besos
de tus dientes, de tus ojos, de tu frente,
para poblar con semillas las nubes
y nazcan lágrimas dulces
así como las del mar
llenas de olvido.

Y que el silencio envuelva tus labios
para que me digas que hoy no estamos cerca,
que estamos lejos, lejos, muy lejos,
así como la vida del sueño
y el sueño del alma,
una taza de café al revés
que nunca  me hable para que pueda escuchar los latidos de este corazón.